viernes, 29 de mayo de 2009

LO IMPORTANTE QUE RESULTA VALORAR LO NUESTRO


“Hemos vivido suponiendo, que lo que era bueno para nosotros era bueno para el mundo, estábamos equivocados
Tenemos que cambiar nuestro modo de vida, a fin de que sea posible vivir mediante la suposición opuesta, que lo que es bueno para el mundo es bueno para nosotros y eso requiere que hagamos el esfuerzo de conocer al mundo y aprender lo que es bueno para él, debemos aprender a cooperar con sus procesos y aprender a ceder antes sus limites
Solo mediante una actitud de humildad y reverencia ante el mudo será posible que nuestra especie permanezca en el” Wendel Berry

Es posible utilizar el bosque como proveedor y generar recursos económicos a través de prácticas sostenibles que aseguren la sustenibilidad del recurso, entendiendo sustentabilidad como mucho más que la mera prolongación de la existencia de las especies que lo componen, pero es necesario actuar con responsabilidad, ya que a la larga la economía y el medioambiente son lo mismo, y si algo es antiambiental es antieconómico, por lo que surge la necesidad de trabajar para que la conservación sea una consecuencia de las buenas prácticas de manejo usadas en la producción, o la producción como consecuencia de la conservación

El crecimiento y desarrollo no solo se consiguen a costa de nuestros recursos naturales y de nuestros paisajes, nuestra provincia tiene especies de flora en peligro de extinción, también de fauna, humedales importantísimos, que albergan una biodiversidad sumamente relevante y espacios naturales que cada día se reducen más
Surge entonces la pregunta ¿cómo traspasar esa necesidad real que existe, por conservar y cambiar nuestra forma de relacionarnos con el entorno, como transmitir que no todo se mide en función de su valor económico inmediato, como transmitir que no solamente lo que es empacable, medible y vendible tiene importancia, como crear conciencia? y valorar lo que tenemos

Quizás debería hablar de cómo los servicios ecosistemicos influyen en todas las actividades económicas, tal vez podría hablas de como estos servicios regulan nuestro clima, podría hablar del tremendo valor cultural del bosque y su estrecha relación con los pueblos originarios, quizás mencionar como el bosque ha sido, es y seguirá siendo proveedor de innumerables ingredientes activos para tratar enfermedades (bosque sanador), podría hablas del bosque nutritivo y como especies que muchas veces desechamos como malezas hoy revelan su tremendo aporte nutricional como por ejemplo el Quelon (maqui), que es una de las especies con más alto contenido de antioxidantes, de especies como la araucaria que han sido testigos silenciosos de la tala indiscriminada y de cómo se reduce su hábitat cada día más
Sin duda podría hablar de muchas cosas, mencionar muchos ejemplos de iniciativas exitosas en materia de conservación y como estas logran mejorar la calidad de vida de las comunidades que las ponen en práctica, podría hablas del pudu y su reducido ecosistema, del michay rojo, especie que se encuentra en peligro de extinción, del huemul que parece que el único lugar donde lo veremos en el futuros será el escudo nacional

Tal vez, en parte es responsabilidad de quienes creemos firmemente en esta tarea y asumimos el desafío, también somos responsables, por quizás no hacer suficiente, sin embargo, no pretendo buscar culpables, si no contribuir con soluciones
Soluciones donde participemos todos y cada uno de nosotros, entendiendo que “la participación ciudadana es la clave del éxito, la comunidad debe ser la parte principal de la solución, no del problema, es necesario, involucrarla desde un principio en todos los aspectos de un proyecto desde la planificación, la capacitación y actividades como también el monitoreo y la evaluación, ya que, una persona motivada desarrollará con facilidad su propio conocimiento y capacidad. Es necesario asistir a la gente local a entender el por qué de los problemas ambientales y cómo pueden mejorar. Una vez motivada, hay que poner en manos de la misma gente los conocimientos adecuados y no solamente en un grupo de extensionistas”

Sin embargo en la parte de la motivación, es donde estamos flaqueando, algo está pasando o mejor dicho nada estamos haciendo, no pretendo criticar a nadie, pues soy consciente que cada persona se encuentra inmersa en su realidad individual y esta tiende a no deja mucho espacio para la participación, sin embargo es posible contribuir desde nuestro espacio individual, con acciones simples, pero efectivas, y quienes puedan disponer de una pequeña fracción de su tiempo para desarrollar iniciativas en conjunto, lo podemos hacer, la participación es mucho más que de decir “ yo apoyo la causa” tenemos que ser capaces de cambiar nuestras conductas y de ver en el bosque mucho pero mucho más que solo madera

Quizás para algunos estos no deje de ser comentarios pasionales, sin argumentos sólidos, sin embargo, nos guste o no es una realidad, la reducción del bosque nativo es algo palpable, es cosa de mirar nuestra Cordillera de Nahuelbuta y nos daremos cuenta que lo que alguna vez fue descrito por cronistas como una selva impenetrable que albergaba gran cantidad de especies de flora y fauna hoy es solo un “Desierto Verde” de especies introducidas, que por más que se pretenda no es bosque, por que las plantaciones no son bosques, y eso no lo digo yo sino la Sociedad de botánica de chile

Tal vez podría mostrar como aquello que no valoramos hoy sin duda un negocio muy rentable, en este aspecto retomare algo que señalaba en un artículo anterior:

“Quelón: (Aristotelia chilensis (Mol.) Stuntz), que produce esas bayas en gran abundancia y estimada calidad. Crece de Coquimbo al sur y su fruto negro (o blanco por excepción) constituye la delicia de los niños y de las torcazas.
Es vegetal sagrado para los mapuches, menos que el canelo e igual al laurel, símbolo de benévola y pacifica intención, y en tal sentido llevado a todas las reuniones sociales; además adorno obligatorio del símbolo religioso, el rehue.
Su uso es múltiple. La corteza, sacada en tiras o huiras, se utiliza para amarras; los frutos se comen frescos a la sazón y secos en invierno, también convertidos en chicha especial, denominada tecu, el jugo sirve para colorear mas el vino tinto y lo que bajo ese nombre se expende; la infusión de las hojas es considerada como un buen medicamento contra fiebres, en las afecciones de la garganta y en la cura de las llagas; su acción astringente es reconocida por la ciencia médica.” Extracto de Botánica Indígena, del misionero Wilhelm Mösbach 1955, impreso en 1992
Sin duda la biodiversidad de nuestro país es inmensa, es ese sentido somos privilegiados, sin embargo cada día más nos damos cuenta de nuestra falta de visión respecto de lo que tenemos, la consigna pareciera ser “lo de fuera es mejor”, ya que nos maravillamos con las especies traídas de otras latitudes y sus virtudes, y a las nuestras, las consideramos casi como “malezas”
Quisiera citar además parte del texto de difusión sobre un producto que actualmente está en los mercados Norteamericano y Europa que dice asi:

El más potente antioxidante botánico del mundo
El maqui es una baya de color púrpura oscuro y también es el antioxidante botánico más potente del mundo, lo que lo convierte en una antioxidante más fuerte que el acai, el mangostino, el goji, el noni e, inclusive, el chocolate. Según una serie de estudios, el maqui también posee importantes propiedades antiinflamatorias y termogénicas, lo que contribuye al alivio del dolor ocasionado por la inflamación y a la pérdida de peso.

Asimismo, el maqui posee una mayor Capacidad de Absorción de Radicales Libres de Oxígeno (ORAC) que cualquier otra baya o fruto conocido por el ser humano. Esto cobra especial importancia en el combate del envejecimiento y de los trastornos relacionados con el avance de la edad.
AVIA utiliza las propiedades promotoras de la salud de la baya de maqui y las mezcla con una combinación exclusiva de nutrientes y minerales que han demostrado su eficacia para ayudar a prevenir o reducir la inflamación y la oxidación—lo que convierte a AVIA en su propia fuente de la juventud personal.
“Desde tiempos inmemoriales, los indígenas mapuches de Sudamérica han venido celebrando los poderes curativos del maqui.”

Para algunos, probablemente las propiedades del maqui no sean nada nuevo, ya que investigaciones realizadas y publicadas en nuestro país hace ya algún tiempo hablaban sobre las tremendas propiedades del maqui, sin embargo desde que se descubrieron las propiedades del maqui, se comenzó a trabajar en la comercialización del producto, en principio para la industria de los colorantes naturales y hoy como podemos ver como un excelente antioxidante, lamentablemente una vez más, nuestro país se está quedando como un mero exportador de materia prima, pese a la tremenda variedad de usos y aplicaciones de productos derivados de esta especie nativa de chile, en otros países, quizás sea este nuestro premio por el poco valor que le asignamos a nuestras especies y ojala podamos aprender algo, ya nos paso una mala experiencia con la mutilla, donde pese a conocer sus importancia, no se le daba el valor necesario, y de pronto aparece un Australiano diciendo que esta especie era de su país, estos no son los únicos casos de especies nativas utilizadas en el extranjero y que en chile son poco consideradas, la biopiratería se remonta a la llegada de los españoles a nuestro país, solo que en ese entonces nadie lo veía como un problema, en el caso de las plantas medicinales son desenas las que hoy producen comercializan en el extranjero sin ninguna participación de nuestro país, en consecuencia sin ningún beneficio

Como la Convención sobre Biodiversidad de Río de Janeiro reconoció en 1992 el derecho de los pueblos sobre la administración de sus recursos genéticos y a recibir una adecuada compensación cuando son utilizados con beneficio económico por otros países, el potencial comercial de productos como la murtilla, maqui y muchos otros resultaría incalculable para Chile si consideramos los múltiples y variados usos, tenemos muchas especies con tremendos potencial, pero por lo general nos damos cuenta tarde cuando en algún otro rincón del mundo se le valora, recién hay las comenzamos a valorar, es sin duda importante el desarrollo de productos a partir de lo que tenemos, pero por nosotros con metodologías adecuadas y aspirando al real desarrollo local, contando con la participación de las comunidades porque de nada sirve un país productor si su gente no participa de dicha producción y de los beneficios que esta genera
Por último mencionar que según un estudio, el yuyo, una hierba silvestre que brota en primavera y que es utilizada por Mapuches y Huilliches para la preparación de fritos, tortillas y guisos, es aún más rico en concentrados proteicos que la espinaca. Su aporte nutricional es significativo, pues contiene un 74,1 % más de proteínas que la espinaca y un 89,3 % más de fibra. Además, contiene 104 miligramos de ácido ascórbico (vitamina C), frente a los 4,4 miligramos que aporta la espinaca. presentan un aporte nutricional similar. Sin embargo, este último tiene cuatro veces menos grasa y entrega 399 calorías, frente a las 425 que tiene el pan
Solo esperar que comencemos a tomar conciencia de lo que tenemos y la importancia que ello supone, y la necesidad de protegerlo, de conservar y de utilizarlo de manera adecuada, de reconocer la importancia del conocimiento empirico tradicional por lo que es, un legado rico en conocimiento y sabiduría

1 comentario:

María Inés Aiuto dijo...

Estimado Edgardo Flores, soy del Grupo de Reflexión Rural y estamos conformando una red en defensa del Montes, del Bosque y de la Selva. Sería interesante contactarnos.
Le dejo el blog de la RED:
http://defensamontebosqueselvagrr.blogspot.com/
Saludos,
María Inés
Bs As